Todo lo que vivo, pienso, veo, aprendo, experimento... Todo deja en mí una huella imborrable. Puede que pase toda una vida y no lo recuerde, o tal vez no sea capaz de ver el efecto que deja en mí, pero cada experiencia cala de un modo u otro en mi ser, me acompañará por siempre en el camino, y me ayudará cuando más lo necesite
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Hemos de
desacostumbrarnos, aprender a dejar atrás los vicios autodestructivos que
nuestra forma de vida, impaciente, ansiosa y necesitada, ha dejado en nosotros,
para abrirnos al cambio, a la voluntad de autocontrol y de disfrute de las
pequeñas cosas del día a día.
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La vida no es una sucesión de acontecimientos,
sino un fluir en el constante despertar de la naturaleza.
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NO aceptar el fracaso o el cansancio como
excusa.
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Siempre es presente
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Predica con el ejemplo
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Practica la continua mejora de ti mismo
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La mayor recompensa por el esfuerzo continuado
es la satisfacción personal.
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Hay lugares resguardados y acogedores para
preservar orgullos nacionales, mientras se desaloja a los pobres de sus
pequeños habitáculos.
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1+1=2 Tan cierto como que el amor es la fuerza
más poderosa de la humanidad.
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Mira hacia el suelo, golpea el balón. No sabes
hacia donde le dirigirá. Sabe que es su elección, él provoca sus
consecuencias.
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Confía en el cambio
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Es aquí, inmerso en la naturaleza, donde uno
entra en comunión consigo mismo y con su entorno.
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El viento se ve mejor con los ojos cerrados. La
paz, el amor, la esperanza y la bondad, también.
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Lo compramos todo, lo explotamos todo, le
sacamos partido a todo. Pero olvidamos admirar la belleza de aquello que
destruimos.
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Siente, penetra en las sensaciones más primarias
y naturales que eres capaz de disfrutar. Abraza tus sentidos, dales la
importancia que merecen. No olvides aprender de ellos.
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El camaleón: Observa tu entorno, aprende de él. Míralo, acóplate a él. Acomódate, adáptate,
camúflate.
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Aprendes de cada instante, maduras a cada paso
que das, te fortaleces con pensamientos positivos, te haces grande al abrirte
al cambio, demuestras tu bondad con la empatía, acaricias la vida gracias a la
experiencia, sigues tu camino.
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Los bellos colores del atardecer, el fresco
aroma de las flores, el fluir del agua. Idóneo paraje para contemplar, admirar
y amar la hermosa vida de la que eres protagonista.
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Los niños juegan libres. Exploran, investigan,
aprenden, sonríen. Nuestra misión es enseñarles a no dejar de hacerlo, a ser ellos mismos y a pensar de manera consciente.
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Existe una fuerza única, propia, interna,
personal e intransferible. Un refugio contra la adversidad, una semilla para la
acción y una guía para el día a día: EL PODER DEL PENSAMIENTO.
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Dentro de una gran esfera, dando vueltas por la
inmensidad del universo, atraídos por la tierra, iluminados por el sol,
acariciados por la brisa, habitantes partícipes de la maravilla natural.
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¿Qué mejor sitio que aquel en el que estas?
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Soy hijo del mundo, admirado habitante de la
grandiosidad, sereno espectador del milagro de la vida, fiel explorador de lo
natural, perseverante pensador del profundo despertar, amante del sol, de las
luces, las plantas, los cielos, los vientos, los besos, las miradas profundas e
interminables, los tiernos abrazos, los bellos atardeceres, amante de los
amantes, de las personas, los sentimientos, las percepciones, la voluntad y la
conciencia, amante de la existencia, de las palabras, la experiencia y la
bondad, amante del amor a la vida, a la creación y a la comunión. Soy amante de
todo cuanto soy, de mis defectos y virtudes. Amante de mis dudas, miedos y
preocupaciones. Amante de mis errores, mis hazañas y mis valores. Amante de mi
cuerpo, origen de todo mi ser, amante de mí mismo y amante de mi entorno.
Amante de todo cuanto existe y amante de la fuerza más poderosa: AMANTE DEL
AMOR.
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Ve. Siéntate en cualquier lugar. Observa tu
alrededor. Obsérvalo.
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Debes conocer bien tu pensamiento, tus ideales y
tus valores para ser capaz de defenderlos como merecen.
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La ansiedad es como una bola de pinchos que
habita en tu pecho. Cuanto más atención le prestas, cuantas más vueltas le das
a la bola, mayor es su efecto y mayor es tu dolor. ¿La solución? Abrazarla con la
esponjosa protección del amor.
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Las relaciones con los desconocidos forzadamente
encontrados suelen ser frías, distantes, tímidas y apagadas. La ausencia de un
nexo de unión tiende a convertirse en un muro infranqueable. Puede palparse la
vergüenza, la distancia y la falta de voluntad comunicativa. Es una soledad
compartida, fácilmente extrapolable a la sociedad urbana de hoy. No nos
sorprende cruzarnos con otro ser humano por las calles, le miramos tímidamente,
observando cómo él hace lo mismo. No nos sorprende un encuentro así.
Probablemente acabemos de vivir uno similar, o pronto nos veremos en la misma
situación.
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No existe el mal, existe la ignorancia. La
sabiduría conduce al bien.
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Necesitamos soledad para conocernos en
profundidad, hallar la paz emocional y guiar los cauces de nuestra experiencia
vital.
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La vida es ahora y es justo aquí.
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Practica el optimismo
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Este es mi camino hacia la felicidad: mirar la
vida con agradecimiento y admiración, exprimir el presente de mi experiencia,
vivir acorde a mis ideales y pensamientos, darme a los demás, ser amor y
apreciar la inmensa belleza de la PURA VIDA.
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El pájaro que se enfrenta al viento y avanza en
contra de su dirección, es el que más esfuerzo y perseverancia ha de dedicar.
Cuando pase la tormenta, sus alas estarán fortalecidas, su ingenio agudizado y
será el más libre de los suyos.
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Idealizamos los recuerdos extasiados,
idealizamos las expectativas futuras, y cae el valor del presente. Esta actitud
nos conduce a la decepción y el desánimo. Vivamos con serenidad y alegría cada
una de nuestras experiencias presentes, apreciándolas por lo que son: una
oportunidad única e irrecuperable de nuestras vidas.
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Al igual que una densa capa de nubes nos impide
ver el sol, el curso incontrolado de nuestros pensamientos, emociones, miedos y
preocupaciones nos aleja de la esencia más pura y gratificante de nuestro ser.
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Sólo valoramos la inmensidad de los mares cuando
el clima acompaña y nos son de utilidad. La valía del hombre sabio reside en
ser siempre capaz de admirar la belleza de cada pequeña gota.
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Los libros te invitan a una reflexión
imaginativa que la televisión se empeña en arrebatarte- Escoge el silencio y la
atención plena.
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Las palabras carecen de auténtica valía si no
van adecuadamente acompañadas de actos y comportamientos congruentes.
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La sabiduría nace de la experiencia vital y la
profunda y consciente reflexión posterior. Pero muere rápidamente con la
soberbia, la envidia y el desprecio a los demás.
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Todos necesitamos amor. Necesitamos entregar gratuitamente
amor. Necesitamos ser correspondidos. Necesitamos invadirnos de su energía. La
ausencia del amor alimenta los grandes males de la humanidad: dolor,
agresividad, apenada soledad, intolerancia, exceso de necesidades materiales,
falta de empatía y compasión, discriminación, exclusión, marginación, soberbia,
prepotencia, desprecio, venganza, avaricia, apatía y egoísmo. El amor
regala la oportunidad de vencerlos y abrir las puertas a la amabilidad, la
empatía, la solidaridad, la comprensión, el respeto, la amistad, el sacrificio
gratificante, la unión y la paz verdadera. Es momento de encaminarse en el
sendero del amor y viajar con él hacia una armonía y una paz antes
inimaginables.
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La felicidad no está en los cielos, no está en
los mares, no está en los dioses, no está en los sueños, no está en las
ilusiones. La felicidad reside en ti. Tú eres felicidad. ¡Alégrate!
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Antes de querer transmitir una enseñanza, un
consejo o una pequeña pizca de sabiduría, asegúrate antes de hacerlo parte de
ti, profundízalo, apréndelo una y otra vez.
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En el control de tus pensamientos reside la
capacidad de ver la vida tal y como tú la quieras ver. Tan solo has de
ser paciente, tener voluntad y disfrutar de los pequeños detalles.
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Hoy, aún en la más lamentable y triste de tus
miserias, podrías estar sembrando el gozo y el bienestar del mañana. Por eso
mismo, no te desanimes, no abandones, ve hacia delante, lucha por aquello que
crees justo y pon el mayor empeño en tu felicidad y la de los demás.
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La vacuidad ética y espiritual de un alarmante
número de habitantes de nuestro tiempo es el logrado resultado de un longevo
proyecto educativo, político, económico y social, de deshumanización prolongada
y progresiva de la muchedumbre ignorante.
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Las inquietudes sobre lo misterioso, lo
espiritual, lo transcendental, se amagan tras el apabullante primer plano de
las preocupaciones políticas y socio-económicas en el transcurso habitual de
nuestra sociedad, olvidando lo primordial.
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Cuando el sol vuela alto, es inmensa la sonrisa.
Cuando la luz cesa, nos abandona a la preocupación. Aprendamos a iluminar
nuestras vidas con la infatigable llama del optimismo vivencial.
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A menudo somos esclavos de nuestros
pensamientos. La conciencia y el autocontrol han de tomar el mando. Si te desvías,
cualquiera es un buen momento para enderezarte. Si las circunstancias de tu
entorno son desfavorables, es tu deber construir una perspectiva optimista y
tranquilizadora. Aprende a ser tú quien decida acerca de tu FELICIDAD.
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La belleza novedosa embelesa los sentidos.
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Hay una vida mucho más plena en la voluntad, la
firme actitud de aprender, crecer y experimentar día a día, momento a momento.
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Mientras la solidaridad no se convierta en un
valor esencial en la ciudadanía, existirán habitantes angustiados por
remediables problemas de carácter social.
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Las diferencias sociales encienden la llama de
una revolución. La mecha se empieza a prender.
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Lo complicado de las discusiones de pareja es
encontrar el equilibrio entre el deseo de reevindicar tu posición y el de
evitar herir al otro y buscar la paz.
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Si buscas algo, si es que aún lo buscas, ese
algo que algunos llaman paz, libertad, amor o felicidad, no has de buscar sin
rumbo. Tan solo has de mirar dentro de ti, aprender a ahondar en tu interior.
Entonces encontrarás
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Como un bebé recién llegado al mundo: observo,
exploro, admiro, me asombro. Es una oportunidad única, es mi vida.
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Siempre hay oportunidad de
aprender, no te rindas.
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Planta una semilla en
tierra fértil, riégala a diario, cuídala, ten paciencia, algún día dará su
fruto.
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Un bolígrafo y un papel,
esas son mis armas. La paz y el crecimiento personal, esas son mis
pretensiones. Paciencia, silencio y naturaleza, ese es mi camino.
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La corriente de los
impulsos emocionales es inevitable. Dejarte arrastrar por ella depende de ti.
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Es el bello contemplar de
la mujer amada, el despertar de la pureza del corazón, la energía de su
sonrisa, la fuerza del amor.
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Cuanto mayor sea la
tempestad, mayor ha de ser tu paciencia.
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Tras la fachada de cada
ciudadano se encuentra una maravilla tan grande como tú mismo, un ser humano,
una vida, una experiencia, un sentir y un pensar.
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Valencia, mi ciudad natal,
verdes jardines junto al mar. Las aves vuelan alto, divisando la gris ciudad.
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El primer error del hombre
es marcarse límites. El siguiente, aceptar con resignación los límites
externos.
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Las prisas conducen
irremediablemente a una catástrofe de acelerada y descontrolada
autodestrucción.
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Que pequeños somos ante la
inmensidad de los cielos. Que débiles somos ante la fuerza de los mares. Que
frágiles somos ante el empuje del viento. Que ingenuos somos al creernos la
mayor maravilla de la naturaleza.
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El mayor reconocimiento
que existe es el tuyo propio.
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En el gozo de la
experiencia presente nace la felicidad y el sentido en la vida del ser humano.
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El hecho de vivir continuamente
encerrado entre muros de hormigón tiene sendas consecuencias en tu interior.
¡Libérate!
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Nos hemos rendido y
sometido ante el ansia y el deseo de las necesidades inmediatas. Hemos
construido el entorno idóneo para satisfacer nuestros impulsos lo antes
posible, sin dejarnos tiempo de reflexionar, contenernos y rectificar, lo cual
dificulta y frena nuestro autocontrol.
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La música dibuja tu
realidad.
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Siempre estás buscando más,
tener más. Imagina que ya lo tienes todo. Y ahora, ¿qué? ¿De qué te sirve
poseer el mundo entero si no eres capaz de apreciar la singular belleza de cada
pedacito de ti?
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Igual que cada gota de
agua en el mar, igual que cada árbol en el bosque, igual que cada abeja en el
panal, eres una pizca única y maravillosa de la grandiosa humanidad.
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Humanidad no es
simplemente la suma de muchos humanos. Humanidad es amor, es sabiduría, es
solidaridad, es cercanía, es cariño, es paz.
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No quiero llegar a ningún
lugar. Tan solo deseo disfrutar del camino.
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Desde niños hemos
aprendido a sentirnos heridos por las ofensas. Tal vez sea el momento de darle
vuelta a la moneda, de dejar de ser “niños”, de respetar, aprender y madurar.
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Kilómetros y kilómetros
invadidos por los humanos, ¿dónde queda espacio para la libertad?
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El amor es como un pez
globo. En su estado natural es dócil, delicado y hermoso pero, cuando el
peligro y los problemas asoman, se vuelve feroz, hiriente. Da mucho miedo.
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Cuando vives en la ilusión
de un futuro imaginado, te condenas a la desgracia. Vive el momento presente
haciendo tuyo todo lo que él es.
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